El Gobierno, «preocupado» por el consumo de cannabis en España, aunque mantiene su plan de regular el consumo medicinal
El delegado del Gobierno para el Plan Nacional sobre Drogas, Joan Ramón Villalbí, ha reconocido este miércoles su preocupación por el consumo de cannabis en España, que se mantiene como la droga ilícita más consumida en el país, también por adolescentes. No obstante, y según ha avanzado en la Comisión de Estudio de los Problemas de las Adicciones del Congreso de los Diputados, la estrategia del ejecutivo en este campo no prevé nuevas medidas y se mantendrá el objetivo de legalizar el cannabis medicinal, tal y como anunció la ministra de Sanidad, Mónica García, hace unos meses.
«Un 20% dicen haberlo consumido en el último año al menos una vez. Nos preocupa mucho seguir valorando la situación y las tendencias del cannabis porque es la sustancia más consumida de las ilícitas y hay una cierta percepción de banalización», ha aseverado Villalbí, quien ha resaltado igualmente que su consumo entre adolescentes mantiene una tendencia descendente desde 2004.
Tal y como ha señalado, en los últimos 15 años, se ha pasado de un 25% de prevalencia entre esa población de edad a un 15% lo que, a juicio del delegado, «refleja cambios sociales y el esfuerzo de todos para conseguir este cambio».
Sí que ha aumentado la proporción de personas de 15 a 64 años que dicen consumir cannabis todos los días —del 1 al 3%—, algo que Vilalbí achaca a la incorporación de nuevas generaciones para las que esta sustancia estaba más presente en su adolescencia y juventud y que, pese a los años, ha mantenido ese consumo.
Con todo, y según ha sostenido el delegado del Gobierno para el Plan Nacional sobre Drogas, «no tenemos indicios de consumo creciente en adolescentes», ni tampoco entre la población adulta, más allá de esos datos que reflejan una continuidad en el consumo de cannabis por parte de los adultos que ya lo consumían cuando eran jóvenes. «Hay que ponerlo en ese contexto», ha insistido en su comparecencia.
Por ello, Villalbí ha asegurado que no hay prevista ninguna regulación ni «ningún cambio» para hacer frente al consumo de cannabis en la «agenda política» del Ejecutivo del que forma parte, «más allá del que hace referencia al uso de cannabinoides medicinales».
Se hará, según ha recordado, a través del Real Decreto que ya prepara el Ministerio de Sanidad y que actualmente está en manos de la Agencia Española de Medicamentos y Productos Sanitarios (AMEPS) para definir el protocolo que permita incorporar esta sustancia al formulario de prescripción de fármacos. «No está prevista la comercialización de hierba, ni de cogollos» ha incidido.
Cannabis terapéutico
La aprobación del cannabis terapéutico es una tarea que lleva pendiente desde la anterior legislatura. Mónica García asumió ese compromiso al prometer su cargo, prometiendo una «regulación muy garantista, pensada para que vaya siendo mejorada desde el marco de evidencia científica y trato al cannabis como medicamento». Los trabajos para la iniciativa arrancaron en febrero y, según ha dicho el delegado, se están «puliendo» ahora los flecos jurídicos para que el texto pueda llegar a Consejo de Ministros cuanto antes.
La norma habilitaría, así, las vías legales para disponer de compuestos terapéuticos de cannabis que hayan demostrado ser eficaces para aliviar el dolor y el sufrimiento de los pacientes que padecen enfermedades crónicas o muy dolorosas. Sanidad informó hace unos meses que la vía que se contempla para su administración es la oral, puesto que consideran que es «más adecuada en términos de efectividad terapéutica y seguridad para los pacientes».
El Gobierno busca, de este modo, regular esta sustancia de la misma forma que ya han hecho otros países como Portugal, Reino Unido o Noruega; y en línea con las «potencialidades terapéuticas» que, tanto la Organización Mundial de la Salud (OMS) como Naciones Unidas ya han reconocido en estos compuestos.