Mikel Herrán debuta en ‘El Intermedio’ con su sección ‘Está todo inventado’
Uno de los fichajes que ha hecho Wyoming esta temporada para El Intermedio es Mikel Herrán, doctor en arqueología conocido en redes como @PutoMikel, debutó este miércoles en el programa.
El zaragozano estrenó su sección Está todo inventado, donde explicará cada semana cómo situaciones que ocurren hoy en día ya tuvieron su reflejo en la antigüedad.
Para debutar, el experto comentó que siglos atrás ya existían los bulos y las fake news contra las minorías: «Las personas nos creemos lo que queremos».
«Sobre todo si podemos echar la culpa de nuestros males a un colectivo que nos cae mal porque rezan raro, tienen otro color de piel o hablan una lengua que no entendemos», explica Herrán.
Y es que el colaborador del programa de La Sexta mostró cómo eso hacía que señalaran a los inmigrantes o a cualquier otra minoría «aunque no hubiera pruebas».
En ocasiones, no hacía falta que existiera un crimen, sino simplemente un rumor, como en el caso del niño de La Guardia, en Toledo, a finales del 1480, que acabó con la quema de varios judíos. «A día de hoy, los toledanos siguen haciendo procesiones por un niño que nunca existió», señala.
Otro detalle histórico que destacó el zaragozano en El Intermedio fue que en la Edad Media «eran de inventarse que los judíos, los musulmanes y los extranjeros eran también un poquito pervertidos y hacían cosas muy polémicas como el sexo entre hombres».
Y recordó que cómo fue primer juicio por sodomía, así como las acusaciones a los musulmanes de «contagiar al resto de sodomía como si fuera una peste».
A base de culpar a estos grupos de personas, primero se planteó como solución obligarlos a convertirse al cristianismo, para posteriormente expulsarlos.
Sin embargo, «esto no solo no hizo que se arreglasen todos los males, sino que provocó una gran crisis al perder algunas zonas de España un tercio de su población o quedar desiertas». Tras eso, contó que «se buscaron nuevos objetivos, como los gitanos».
Herrán concluyó recomendado no dejarse llevar por los bulos y contrastar la información, «sobre todo si ese bulo nos lleva de forma muy conveniente a un grupo entero de gente y asume que todos son un peligro en vez de… personas».
