No era la típica boda de los años 60
Gemma Cuervo y Fernando Guillén estuvieron muy enamorados durante su matrimonio, algo que se recordó de forma muy bonita en el último capítulo de la temporada en Lazos de sangre. «Estuvieron seis meses de noviazgo y se convirtieron en una pareja muy admirada«, explicaron.
Fue la misma Gemma Cuervo quien contó cómo se conocieron: «Un amigo vino a mi casa y se trajo a Fernando, que también era amigo suyo. De ahí, pues un día nos hicimos novios».
Bea Cortázar dio más detalles: «Fue un flechazo entre ambos: dos jóvenes actores con ganas de triunfar y guapísimos los dos; era inevitable». Julieta Serrano, amiga de ambos, acudió a la boda. «Fue sencilla, porque no era época para gastar dinero», recordaba.
Las nupcias de los actores se celebró en Barcelona, en 1960. «Fue un sábado, y ya el domingo aprovechado para hacer la comida de bodas nuestra porque llegaba la compañía [de teatro]».
«La boda no fue la típica de los años 60″, afirmaba Beatriz Cortázar. «Fue con tintes mucho más intelectuales, con muchos actores compañeros de profesión», añadió. La boda fue un éxito, que muchos recuerdan aún con mucho cariño.
